Consiste en la activación manual de la circulación linfática para mejorar su flujo y favorecer su correcto funcionamiento.
Efectos beneficiosos del drenaje linfático:
- Elimina toxinas.
- Regula los líquidos del organismo.
- Mejora la circulación de retorno.
- Aumenta las defensas.
- Controla la presión sanguínea.
- Mejora la función renal.
El drenaje linfático también es un buen tratamiento para movilizar las acumulaciones de grasa y líquido bajo la piel. Mejora su aspecto y combate enfermedades y afecciones como la celulitis o el acné.
Otras aplicaciones del drenaje linfático son los procesos postoperatorios, ya que contribuye a acelerar la curación de los tejidos, evita que se produzcan edemas, reduce la inflamación y el dolor y aumenta la calidad de la cicatriz.